"La inspección ha determinado lo
que siempre hemos defendido; que el colegio actuó al margen de la ley y con
intencionalidad de perjudicarme inventando un procedimiento que nunca se aplicó
a ningún otro candidato, evidentemente, para enmascarar sus motivos
homófobos", declara el docente, que ya ha incorporado el texto al recurso
presentado ante el TSJA, que previsiblemente dictaminará la resolución del caso
en los próximos meses. Independientemente de lo que resuelva el TSJA.
La resolución del TSJA será un escalón más
en la trayectoria judicial de este caso, que comenzó en enero de 2014 cuando el
profesor presentó una demanda contra el
colegio religioso en el que trabajaba por una supuesta
vulneración de los derechos fundamentales. Parte de la acusación se basó en la
grabación de una charla entre el docente y la responsable del colegio, una
cinta que presentó como prueba. En la grabación, la responsable del colegio apuntaba
que si los padres supieran su orientación podría ser un problema. “No
te puedo decir que la cosa vaya a quedar igual (...) Lo mismo no sucede
absolutamente nada, que lo dudo, que no creo que... Pero te lo tenía que
decir”, dijo la responsable, según la grabación.
El Juzgado de lo Social 3 de Jerez
desestimó en mayo de 2014 la demanda del profesor, aunque la
fiscalía apreció durante la vista una vulneración de los derechos fundamentales
del profesor. Será el TSJA el que determine cómo prosigue el caso,
independientemente del veredicto, el centro está obligado a pagar 122.989 euros
al profesor.