El concepto de Tolerancia parte de un hecho simple: “los seres humanos somos distintos y diferentes”, y del principio de reconocimiento de la igual dignidad intrínseca y derechos inalienables de todos los miembros de la familia humana, a partir de ahí, su sintética propuesta es respetar, aceptar y apreciar al “otro” ser humano, con su realidad diferente. Inicialmente referido a la diversidad religiosa, la evolución del contenido del término sostiene una voluntad de convivencia reconociendo la diferencia, en todos los ámbitos de relación como personas. Arranca de la premisa de armonizar la diferencia, de lograr la unidad desde la diversidad, de ser diferentes e iguales en derechos, de aceptar al distinto y reconocerse en el igual valor humano, porque en esencia es una manera de entender la relación con “el otro”, el diferente a tu yo o identidad”.